Cientos de personas se acercaron a la madrileña plaza de
Ópera para conversar directamente con la activista y defensora de
derechos humanos egipcia Yara Sallam.
Nos trasladamos por unas horas al centro de El Cairo, o a la llamada Plaza
de la Libertad, donde Yara Sallam nos cuenta cómo se ha vivido la
revolución desde el punto de vista de las mujeres, y lo más importante
cuál va a ser el futuro de Egipto y qué papel jugarán las mujeres en él.
“La revolución, no ha acabado, continúa en Egipto porque el régimen
militar que todavía está al frente del país, trata de silenciar al
pueblo, y especialmente a las mujeres”, explica Yara a todos, pero sobre
todo, a todas las que le están escuchando con gran atención.
Y es que para reclamar los derechos de las mujeres será necesario
ganar el espacio público y hacerse oír, pero sin embargo “los militares
egipcios intimidan a las mujeres con pruebas de virginidad y ataques
sexuales” como ya ocurrió con anterioridad durante los 18 días que
permaneció ocupada la Plaza Tharir. Y es que deliberadamente "Se excluye
a las mujeres de la toma de decisiones apartándolas de los órganos
ejecutivos y con la violencia sexual como arma".
En Egipto no hay una reflexión acerca de lo que significan los derechos
de las mujeres, “En Egipto mucha gente no tiene conciencia de lo que es
el feminismo y este es el gran desafío” dice Yara. Yolanda Iglesias,
representante de Asamblea feminista de Madrid, apunta que “Aquí se viven
problemas parecidos para transmitir que el feminismo persigue la
igualdad, incluso dentro del movimiento 15M".
Susana Albarrán, codirectora del programa radiofónico Nosotras en el
mundo, pregunta a Yara sobre la imagen estereotipada de las mujeres
árabes. A lo que responde que en Occidente deben dejar de lado sus
prejuicios, porque "no es cuestión de velo, sino de un mundo
patriarcal"; muchas mujeres piensan que “la lucha femenina es solo en el
mundo islámico y no se dan cuenta de que es en todo el mundo”.
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